- El concepto de los 10 Pasos del Ritual Coreano de Belleza se popularizó allá por el 2008 por #CharlotteCho
En aquel momento, para una mujer occidental, entender el concepto asiático de cosmética por capas era muy complejo. Hoy en día creo que esto está un poco más digerido. Sin embargo, siempre sigue generando dudas y consultas.
Una cosa a tener en cuenta es que este Ritual no es taxativo ni es obligatorio para todos, porque como dijimos varias veces, cada piel es un Mundo. Esto es simplemente una guía, que tendrás que explorar solo tu, con el espejo y con tu conciencia, para analizar cuáles de estos pasos tienen sentido para vos y cuáles no.
Pero hay algunos pasos que NO se pueden obviar si lo que se busca es un resultado duradero en términos de piel saludable.
1- Limpieza: no podemos obviar una buena limpieza (entiéndase “buena“ como una limpieza profunda, pero respetuosa de la piel). Personalmente no soy una fanática de los dispositivos de belleza que ofrecen una limpieza profunda deshaciéndose en el camino con todo lo que encuentran a su paso. Prefiero productos que sean efectivos pero que respeten la microbiota de la piel y que agreguen ingredientes emolientes e hidratantes en el proceso. La etapa de los productos super astringentes ya fue.
¿Y la Doble Limpieza? Consiste en limpiar el rostro con 2 tipos diferentes de productos, el primero en BASE OLEOSA y el segundo en BASE ACUOSA. Por ejemplo, un desmaquillante oleoso primero y luego un jabón o espuma de limpieza. La Doble Limpieza, en estricto rigor, solo tendría sentido en el ritual nocturno, aunque a varias (como a mi) me encanta hacerla también en el ritual de la mañana.
2- Tónico: un paso BÁSICO en el Ritual Coreano. El tónico coreano (jamás será astringente) cumple varias funciones que realmente vale la pena incorporar.
- Equilibra el PH de la piel (que puede verse afectado por el proceso de limpieza)
- Prepara la piel para los siguientes productos
- Es la primer capa de hidratación acuosa.
3- Hidratación: no podemos obviar un producto (o varios) hidratantes. No solo para devolverle algo de agua y aceite a la piel, sino para evitar la pérdida de agua transepidérmica.
4- Protección Solar: y NO podemos obviar la protección solar diaria, 365 días del año. Y en este último paso es donde tenemos que ser extremadamente cuidadosos. Los asiáticos lo saben y lo practican hace miles de años; nosotros recién estamos comenzando a tomar conciencia. El bronceado es simplemente una respuesta de la piel a una agresión externa. Si buscamos una piel radiante, necesariamente tendremos que buscar una piel saludable, y si eso es lo que buscamos, entonces la exposición al sol no puede estar dentro de nuestros planes. Ni en verano, ni en invierno. (De la exposición a los rayos UV en cabinas de bronceado ni hablo porque me afecta emocionalmente, jaja!)
Si te gusta el look bronceado, te recomiendo probar la BB Cream Bronze. Vas a lograr ese color que tanto amas sin exponer tu piel a un riesgo innecesario.