Comencemos por el principio…
Corea del Sur es un pequeño país (casi la mitad de pequeño que Uruguay en extensión geográfica) con unos 50M de habitantes, de los cuales aproximadamente la mitad vive en su Capital (Seul) y sus alrededores. Se calcula que en este país hay aproximadamente, unas 10.000 marcas de productos cosméticos (si, leíste bien, diez mil).
Corea del Sur tiene altos índices de desarrollo humano y económico. Es un país muy innovador en términos de tecnología (imaginen que de allí provienen marcas tales como SAMSUNG, LG y KIA, entre otras tantas).
Sin embargo, es una cultura que también venera y enaltece lo milenario de su historia. Si bien son muy avanzados en muchas cosas, no dejan de mirar y aprender de su pasado. Y es así como la cosmética coreana reúne lo mejor de ambos mundos: la sabiduría y las propiedades de la medicina tradicional asiática con los últimos desarrollos e innovaciones tecnológicas.
El cuidado de la piel en Corea es parte de su cultura…y es una parte fundamental! Para los coreanos, la apariencia física no es meramente una expresión banal, es también un reflejo del cuidado del cuerpo y del alma. Es por ello que se calcula que dedican aproximadamente el doble de tiempo que una persona occidental al cuidado facial. Y eso…SE NOTA!
Las pieles coreanas son lozanas, parejas, luminosas…y su apariencia física (para nosotros los occidentales) siempre es de mayor juventud. Sus rostros son aniñados y es realmente difícil calcular la edad real solo mirando esos semblantes de “porcelana“.
Para la cultura coreana y asiática en general, cuidar la piel por fuera implica también cuidársela por dentro (con una sana y equilibrada alimentación). No se trata solo de utilizar capas y capas de productos, sino también de protegerse del sol (durante todos los días del año); de enseñarle a un niño que “broncearse“ no es saludable y que debe aprender cómo colocarse el protector solar y cómo limpiarse correctamente el rostro desde muy temprana edad.
Para la cultura coreana, lo Primero es la Piel, luego viene el maquillaje. No vale de nada invertir en maquillaje de buena calidad si tu piel no está saludable. Y para ello la PREVENCIÓN es fundamental en este Ritual. Los coreanos no reaccionan a su piel, los coreanos accionan. Visitan al dermatólogo regularmente y desde temprana edad; EVITAN que las manchas aparezcan (no tratan de eliminarlas como nosotros); retrasan los signos de la edad (utilizando siempre protector solar, principios activos despigmentantes y antiarrugas, antes de que estas arrugas aparezcan), etc.
Y una cosa fundamental en la cultura asiática: el cuidado personal NO ES UN LUJO! El cuidado personal es para todos, no importa la edad que tengas (ni el sexo) ,ni el nivel socioeconómico al que pertenezcas.
Y por último, los consumidores coreanos son extremadamente exigentes. Tienen la suerte de tener a su disposición muchas marcas, de muy alta calidad (no solo en términos de formulaciones, sino también en términos de envases, embalaje, etc) por lo que, si notan que una marca no “cumple“ con el resultado que “promete“, pues cambian y se van a otra. Es por ello que las empresas de cosmética, para sobrevivir, deben ser extremadamente competitivas. No tienen otra opción más que innovar y mejorar constantemente sus formulaciones, sus envases, su presentación, etc.
Y es por todo lo anterior (y muchas otras cosas más) que Corea del Sur es considerada como la Mecca de la cosmética mundial.
